Ya está visto para sentencia el juicio que se está desarrollando en Córdoba contra un trabajador social del Ayuntamiento montillano, acusado de cometer cinco delitos de abuso de poder y uno continuado de abuso sexual.
Los hechos se remontan hasta el año 2007, cuando presuntamente, el acusado comenzó a aprovechar su condición de funcionario público para obtener favores sexuales, a cambio de la concesión de ayudas a las víctimas. Aunque inicialmente la fiscalía solicitaba una pena de más de 14 años de prisión, finalmente rebajó ayer su petición de condena a 21 meses de cárcel y 12 años de inhabilitación absoluta.
Tras la vista oral finalizada ayer, el juicio ha quedado visto para sentencia.