Una de las vallas perimetrales del antiguo instituto Emilio Canalejo fue dañada durante el pasado temporal de viento y lluvia. Desde entonces el perímetro permanece acordonado, ante la posibilidad de que acabe cediendo, sin que se haya encontrado una solución definitiva. Este edificio sigue siendo competencia de la Junta de Andalucía, de manera que el Ayuntamiento no puede realizar ninguna actuación, más allá de tratar de garantizar la seguridad de los peatones en la zona. El problema ya ha sido puesto en conocimiento de la administración autonómica, a la espera de encontrar una solución.
