Las organizaciones agrarias de la provincia pronostican un otoño de movilizaciones para protestar por la situación que vive este sector. Aseguran que es «insostenible» por el aumento desbocado de los costes de producción que provocan una pérdida progresiva de rentabilidad en las explotaciones de miles de agricultores y ganaderos. A ello hay que unir los daños en las cosechas, después de mes de sequía, pero también el endurecimiento de las condiciones financieras y el incremento de los factores de producción. Por todo ello, insisten en que está en jaque el futuro del sector agrario, pero también la soberanía alimentaria del país.
